~Práctica de porristas

Las fechas estaban pasando muy rápido, y no habíamos practicado mucho para lo próximo: el partido de fútbol. Sue había estado ocupada en muchas otras cosas, y no le había dado tanto tiempo a las prácticas, pensando que nosotras practicaríamos sin ella de todas formas. Pero muchas chicas del grupo no precenciaban las prácticas, y no había mucho más que decir.
Sue me dijo que las reuniera, y eso hice.

Luego de avisarles a todas el horario y el lugar, me dirijí a la cancha exterior en la cual prácticábamos. Llevaba mi uniforme y mi bolso. Lo apoyé en una de las gradas y ví que no había llegado nadie, por lo que me limité a esperar a que el equipo apareciera.

Había recibido un mensaje de Quinn que decía que nos teniamos que juntar en las canchas deportivas,ya que el partido de futbol de los chicos estaban proximos a realizarse por lo que nosotras debiamos ensañar nuestros números para así animar a nuestros chicos de la escuela.

Al llegar a las canchas ví sentada en las gradas a Quinn por lo que me acerqué a ella.

-hola Quinn-la salude alegre al verla mientras me sentaba a su lado mirando alrededor que Sue no estaba presente cosa que me extraño

Por fin empezaba el entrenamiento de animadoras, podría demostrar lo que valía después de que no me aceptaran en el Glee Club, pero no me iba a poner triste por ello, no señor, por lo menos era animadora y para mi eso era un gran logro, aunque siempre se puede pedir más ¿no?

Estábamos muy cerca de un gran partido y todas todas todas debíamos movilizarnos para animar a nuestro equipo e ir en contra de las otras animadoras del otro equipo, por supuesto eso no era nada facil, así que supuse que nos habían llamado por ello.

Llegue a las canchas de deportes y vi a dos animadoras con la misma ropa que portaba yo, así que fuí a acercarme a ver que ocurria, y claro...debiamos estar juntas.

- Hola, chicas, ¿me conoceis?, no, soy Lian Muñoz, la nueva animadora del programa de intercambio de Mckinley. Y estoy encantada de estar en el equipo.

Acabe de explicar con una gran sonrisa...no era tan dificil saludar, y a ellas no las conocia, pero si conocia a Charlie, a Santana y a Brittany.

Las vacaciones habian acabado y con ellas mi libertad de las practicas con Sue... asi que me dejaron a entender que a las 3:00pm estuviera en la cancha para comenzar a practicar... al llegar me di de cuenta de que casi nadie estaba alli asi que entre animada y brincando con algunos saltos de mas.
-Hola chicas!- dije mientras que me paraba al lado de Quinn - Charlie Sommers lista y reportandose para particar- dije mientras que sonreia ampliamente.... extrañaba mi uniforme y mas las practicas dolorosas de Sue.
Mire las gradas y estaban unas que otras chicas en ellas... -Lian!- dije mientras que me hacercaba y le saludaba contenta y muy feliz... hacia ya un poco de tiempo que no la veia y no estaba demas saludar a las otras chicas... Observe fijamente y me di de cuenta de que Estaba Michelle, Alejandra y Roxanne... Sacudi la cabeza y me agarre una cola en mi cabello... tanto tiempo sin que me lo recordaran y ya se me estaba olvidando que lo tenia que usar agarrado.

Habia llegado temprano... la verdad no tenía mucho que hacer por lo que decidí irme antes a la cancha hacer algo de ejercicio y luego esperar la práctica. Me encontraba descansando recostada en las graderias, estaba escuchando mi ipod, como siempre evadiendome de todo lo que sucedía a mi alrededor. Si, me estaba transformando en una ermitaña pero poco me importaba. Solo esperaba que apareciera Allyson o Britt..

Volteé mi cabeza y observé como iban llegando una por una, cual de todas más emocionada...resoplé aburrida y seguí tarareando la canción que escuchaba mientras movia mis pies siguiendo el ritmo. De pronto algo llamó mi atención. Me levanté y miré bien, me froté lo ojos y volví a mirar. Era un enorme cañón de esos de ferias, donde lanzan a la bala humana. -Dios!! la entrenadora está loca- dije para mi pensando en que ocurriencia podía tener Sue esta vez. Me quedé analizando el enorme aparato mientras pensaba nerviosa en quien sacaría el premio de ser lanzado en esa cosa... "mmm...creo que estar al fondo de la pirámide me hace una candidata...además Sue aún cree que mis pechos son airbags", pensé y tragué intranquila.

Llego bastante temprano a la práctica, imaginando que sería maravilloso ponernos al día porque el partido se aproximaba cada vez más y realmente, las necesitábamos.

Al tiempo que me acerco, no pude evitar sonreír al ver a Santy allí, junto al resto de las chicas; aunque debo reconocer que llamó poderosamente mi atención el super cañón ubicado en el campo. *¿Estamos en guerra y yo nunca me enteré?* pienso confundida mientras me llevo una mano a la nuca y me quedo parada mirándolo con expresión extrañada en el rostro y el ceño fruncido.

Aún con esa expresión y sin poder quitar mi vista del enorme cañon, les comento a las chicas distraída: -Buenas Señoritas...¿listas para la práctica de hoy?-; sé que me debo de ver rara, pero sinceramente, ¿cuantas veces una chica como yo vería un cañón de semejante tamaño otra vez en la vida?.

Aunque no quería llamar la atención, ya tenía suficiente con que media escuela estuviera corriendo rumores sobre mi sexualidad,eso ya era recibir DEMASIADA atención; mi concentración regresa al equipo, e intentando fingir con mi sonrisa de niñita educada de siempre, camino a pasitos ,rápidos pero elegantes, hacia Santana, con quien me siento más cómoda, y sin dudarlo, me siento junto a ella y Brittany, segundos después de saludarlas tímida con la mano en el aire.

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Ví que las chicas iban llegando poco a poco. Saludé a Lian con una sonrisa, y luego ví que Santana no tenía muchas ganas de practicar. Pero, debería hacerlo. Después de todo, yo no la estaría criticando cada vez que diera un paso por la cancha al igual que Sue. Saludé a todas con una sonrisa, algunas forzadas, otras sinceras. Finalmente, comencé a hablar.

-Bueno, como ya saben, el partido se acerca, y hemos perdido mucho tiempo. Más las que pertenecemos al club glee -admití y miré a Santana y a Britt y al resto de las chicas, para luego dirijirme hacia las demás- Sue me ha dejado a cargo de esta práctica. Dijo que tenía asuntos personales que no podía ignorar. Tambien dijo algo sobre el cañón, pero... -lo miré y fruncí el ceño- No vamos a utilizarlo hoy.

Miré a las chicas.
-Sean bienvenidas las nuevas integrantes, supongo que ya sabrán su posición -dije refiriendome a las formaciones y a la pirámide- Ahora.. vamos a practicar nuestro número para el partido. -dicho esto, me encaminé hacia la cancha, alejandome de las gradas. Esperé a que nadie tuviera nada para decir. Nada malo para decir. Porque ya me imaginaba algun rollo con Jane, o Mich, o Santana, y solo esperé a que me siguieran y fueran a sus posiciones.

Michelle no le prestó atención a ninguna de las recién llegadas, siempre que alguien pasaba por su lado Mich se detenía a criticar su vestimenta peinado y esas cosas, pero esta vez estaba demasiado absorta en sus pensamientos. Con los codos recargados en las rodilla y el rostro entre sus manos, pensaba que daba las toma, ni Santana se le había acercado, nadie, no le sorprendía ella no era precisamente la ms querida de las porristas y poco le importaba eso. Se sentía tan mal cn sigo misma, por haberse enamorado de alguien que la final jamás se di cuenta de o mucho que ella lo amaba, aun sin ser consciente de ello. Suspiro y miro a Quinn de reojo mientras hablaba. Puso los ojos en blanco cuando menciono al dicho club glee, “Pobres perdedores, todos y cada uno de ellos” pensó la castaña para sí misma si hacer ningún tipo de excepción en sus pensamientos. Quizá Puck, pero él también se había ganado su desprecio. Cuando observo que Quinn comenzaba a alejarse a tomar la iniciativa sobre las chicas. Mihelle se levanto rápidamente la siguió. Se aclaro la garganta ruidosamente esperando que Quinn se diera la vuelta. La miro con superioridad y frialdad, apenas esbozando una leven sonrisa un tanto malvaba, quizá por mal que se sentía, muchos sentimientos negativos encontrados n debían de dejar nada bueno. –Por favor, Quinn no se cómo pretendes hacerte cargo de un grupo de chicas cuando todas ya sabemos que preferirías estar en el grupo d perdedores que tratan de cantar cuando se escuchan peor que un gato maullando. comenzó a decir Michelle no sabía si se estaba burlando o si pretendía ser hiriente, a veces ni ella sabía lo que decía, solo quería desquitar todo lo que sentía contra alguien. –Sue olvida muy rápido, si vuelves a quedar embarazad quizá esta vez no te quite el uniforme.-Michelle seguía mirando a Quinn a los ojos mientras hablaba. –Y el cañón, vamos no es tan mala idea, Brit no puede quedar más estúpida, eso si que sería todo un logro.-si Mich no hubiera estado cegada por todo lo que sentía se hubiera arrepentido al instante de decir toda eso, pero no tenía el mas mínimo remordimiento. Se cruzo de brazos, probablemente esperando a que todas las chicas se le fueran encima. Pero la mente de Michlle le decía que ya nada podía ser peor.

Mientras estaba caminando, comenzé a escuchar pasos que se acercaban a mis espaldas demasiado rápido como para esperar algo bueno. Alguien tosió fuertemente apropósito y me di la vuelta. Oh, no.. era Mich, y me miraba con cara de "quiero asesinar a alguien".
Escuché todo lo que tenía para decir. Y con cada frase que ella soltaba, más se me fruncía el ceño. Dios, parecía Berry cuando hablaba. Me daba ganas de callarle la boca. ¿Cómo podía decirme eso? Pero cuando dijo lo de Britt, se pasó de la raya.

-Ok, hasta aquí llegaste, Michelle -dije enojada y me acerqué a ella. -¿Quien te crees que eres para decir algo así? Siempre criticando, dando tus opiniones, que, déjame decir, son patéticas. -la miré. No sabía que tenía, pero con todo lo que había pasado hasta ahora, lo de Finn, y ahora esto.
Ahora, si querían molestarme, no había duda que conseguirían lo que querían.
-No sé porqué te molesta tanto que formemos parte del club glee. Y aún así, míra.. no eres tu quien está en la cabecilla del equipo -dije eso sin pensar sus conecuencias. Suspiré y la miré. En algún punto, mis ojos mostraban el cansancio que tenía de escuchar sus quejas en cada práctica.

-Si tienes problemas personales -comencé de nuevo tras un momento de silencio- no es nuestra culpa que los traigas al campo y te desquites conmigo, o con Britt -aún no podía creer lo que le había dicho- No es nuestra culpa que te moleste tanto venir aquí y estar con nosotras. Si es así... ¿porqué no te vas y dejas de torturarte a ti misma? Cerré los ojos. Tal vez había sobrerreaccionado, tal vez me estaba pasado, o tal vez no. No lo sabía. Pero lo que sabía es que ya no soportaba sus comentarios. Ni aquel día, ni ningún día más.

Sonreí al ver que se me acercaba Britt y luego mi querida novia secreta. -Si que se le soltó un tornillo a Sue no creen- dije aún admirando la bestialidad del cañón. Por un momento me imagine disparando a Berry o Jewfro y sonreí perversamente, con mi típica expresión psicópata...pero toda imaginación se fué cuando escuché a Quinn que nos llamaba al campo.

Me levante y resoplé... -Ashhh, volver a estar al fondo...mi espalda no lo soportará mucho más- dije frustrada mientras me acercaba al lugar. Sentía deseos de abrazar a mi chica, pero me contuve...por ningún motivo iba a dejar que el resto de la escuadra se enterar de aquello.

Quede sorprendida mirando como Michelle y Quinn discutian otra vez. Ya era casi un hábito de todos los entrenamientos...realmente era molesto y pensé en no meterme, pero no pueden culparme, Michelle insultó a mi mejor amiga y eso no se quedaría asi.
-Que has dicho Michelle??...que rayos estás pensando al decir esas cosas de Brittany...y de Quinn- dije esto último sin mucha importancia pero bueno en este momento estaba con Fabray. -Mejor deja de hablar imbecilidades y comencemos la práctica de una vez...recuerda que tienes que aprender a maniobrar con fuego...mira que el último ensayo dejaste mucho que desear- mentí solo para picarle el orgullo...y es que nadie se mete con mi Britt. Nadie!.

Solamente podía mirar a Quinn con el rostro inexpresivo. Le dolían mucho las palabras de la chica, se podía pensar que solamente se quedo hay por puro masoquismo, cualquiera se hubiera largado llorando con solo escuchar tal calificativo “patética” si eso era lo que había dicho Quinn y no solo ella lo pensaba, sabia que todas ahí, incluso ella tenían esa visión de su persona. Ni siquiera una mirada de odio cuando Quinn le restregó en la cara que aun siendo una perdedora tenia mejor puesto que ella en las animadoras. Pr unos instantes Michelle realmente puso atención a las palabras de Quinn. Pudo sentir como los ojos le brillaban de nuevo y en su rostro se podía notar la tristeza por haber perdido a aquella persona y el odio que sentía hacia Quinn. –No sabes nada, Fabray.-fue capaz de murmurar la chica sin agachar la mirada aun sabiendo que tenía los ojos lloros pero a nadie le daría el gusto de que la vieran llorar.
Michelle soltó una risita y le dedico a Quinn una sonrisa torcida. Para después negar con la cabeza. –Eso quieres verdad, Quinn, que me vaya verdad Quinn y de después de mi ¿Quien seguirá?.-ella no esperaba ningún tipo de respuesta, así que continuo. –Todas aquí ya sabemos que eres la consentida de Sue, si Santana hubiera salido embarazada, de verdad crees que la hubiera dejado volver.-miro a Santana de reojo haciendo caso omiso de las palabras que había dicho esta. –Creo que ustedes tres debe de conformarse con ese coro y dejar que las porristas que de verdad estamos dedicadas al frente, si no me equivoco ustedes ya han faltado a varias practicas por estar cantando, si es que así se le puede llamar a lo que hacen.-se acerco un poco a Quinn. –Admítelo, hace mucho tiempo que dejaste de ser popular.-murmuro Michelle. Cada palabra que había soltado la chica habían estado llenas de veneno y sabía que decirle a una porrista que ya no era popular era una de las peores cosas que se podían decir. Pero Quinn se las merecía todas y cada una de ellas, por tener el puesto de capitana del equipo, ese puesto que Michelle había deseado desde que ingreso a la escuadra y lo que paso en sus vacaciones le había dado valor para al fin sacar su verdadero yo ante todas ellas. Miro hacia la puerta en espera de que Sue entrara, pero en parte le daba miedo que a fuera, que prefiriera a Quinn y que terminara siendo ella quien quedara fuera de la escuadra. Sin decir nada más se dio la vuelta y miro a Britt. Le dedico una mirada un tanto apenada y después de eso solo pudo sentarse en las gradas. Pensando que estaba claro que se negaba a practicar con Quinn como capitana.

Noté como Santana se puso de mi lado, del lado de Britt. Y luego miré a Michelle, que parecía estar apenada y al mismo tiempo, parecía querer descargarse y decir todo lo que tenía para decir.
Y así fue. Se acercó a mi y me dijo todas esas cosas que seguramente había pensado todo este tiempo, y que al fin las daba a conocer frente a todo el equipo. No dejé de mirarla a ella. Entrecerré los ojos, porque algo me decía que se me iban a empañar en cualquier momento. ¿Porqué las palabras de aquella chica lograban debilitarme? ¿Sería que tenía razón?
¿Era cierto que yo no debía ser más la capitana, que estaba haciendo todo mal? ¿Era cierto?

Una vez que la vi sentarse en las gradas sin decir palabra más, miré a Santana y a Britt, y luego pensé. Ya estaba harta de todos esos juegos y peleas. Miré al resto de las chicas. Estaba segura de que ellas tampoco se divertían mirando aquello.
Luego de un momento de silencio, caminé hasta donde estaba Michelle. Cerca de ella, estaba mi bolso. Lo miré, lo tomé y me lo colgué al hombro. Luego volví a mirarla a ella.
-Si tanto piensas que puedes hacerlo mejor que yo, felicitaciones. Lograste lo que siempre has soñado. Me voy -dije simplemente. Prefería estar con el club glee antes de pelear horas y horas con auqella muchacha. No tenía el derecho de tratarme así, y yo ya no soportaría más. No me importaba la popularidad. Además.. salía con Sam. No debería preocuparme por nada más que por él, y glee. Porque eso era lo que realmente quería. Y ahroa me daba cuenta.
Me di la vuelta y me fui hacia el interior del colegio.

Escucho atenta la discución de las chicas, y en cuanto siento la mirada de Santana sobre mí, como acto reflejo, fijo mis ojos en los suyos algo confundida sobre que hacer, con el ceño fruncido y la mente perdida, llevándome una mano a la nuca.
Por un lado, estar en el equipo me aseguraba popularidad y respeto por parte de los estudiantes; pero ya me estaba cansando de los ácidos comentarios de la Coach hacia mi persona y además no me vendría mal tomar un respiro....

Entonces me levanto con actitud decidida, diciendo : -¿saben que?...estoy con ellas!...yo también me largo- ; volteo hacia Santy y las demàs, y sonriendo relajada, comento llevándome una mano a la cintura: -no me vendría mal un respiro....además....- ,fijo mis ojos en Mich con expresión seria, los labios fruncidos pero a la vez, inclinando los hombros despreocupada, -Mich, lamento decirte esto pero... no soportaría practicar contigo después de como trataste a mis amigas....-; lo que dije fue sincero, incluso aunque a Brittany o a Quinn no las conociera tanto, llegué a tomarles bastante cariño, y para mi, no era justo seguir como si nada hubiera ocurrido....y por otro lado, tenía demasiados temas familiares por los cuales preocuparme como para estar inmersa en tanto drama.

Dicho eso, camino hacia las Quinn, Britt y mi novia, sin voltear a ver a las demàs; siguiendo con mi actitud positiva de que los cambios son por algo, y no siempre por algo malo....

Michelle no era capaz de decir nada se había quedado muda gracias a la cólera contenida, podía notar sus orejas rojas y sus mejillas pálidas, sentía que el aire le faltaba y que posiblemente caería en cualquier momento, cuatro porristas menos gracias a su comentarios. Sue definitivamente la mataría pero Sue no estaba y ella solamente podía quedarse ahí para observando como esas chicas se marchaban sin tomar ninguna iniciativa por detenerlas o decirles algo estúpido como “lo siento” porque no sentía nada, se había sacado todo lo que llevaba dentro y le importaban realimente muy poco las demás. –Si quieren irse son libres de hacerlo.-logro decir cuando estas ya estaban un poco lejos, dudo que la hayan escuchado. Se giro hacia las demás porristas dedicándoles una irada inexpresiva como la que había tenido la mayor parte de las vacaciones. –Y para las que se quedaron, son libre de irse si quieren, pero saben que sin ese uniforme no son nada.-comento con desdén. Miro a Jane cuando estaba hablo. Llevar la fiesta en paz con ella sería algo nuevo, pero sin duda estaba dispuesta a intentarlo. Michelle aplaudió para atraer la atención de las chicas mientras se acercaba al mp4 de Jane y ponía pausa a la canción. –Vale chicas, las que quieran seguirnos a Jane y a mi comiencen a calentar, al final de la practica comenzaremos a hablar sobre la canción que con la que montaremos la coreografía para próximas rutinas. -dijo Michelle ya un poco mas calmada. Un intento de sonrisa fue con lo que agradeció lo que había echo Jane, en eso momento Michelle era incapaz de pensar, el acto de Jane había sido como una cubeta de agua fría sobre ella que sin duda la hizo reaccionar. -Ahora hagan lo que yo, no queremos que nadie se lastime.-dijo ella tratando de que sus palabras no se escucharan como una orden sino como algo que debían hacer para soportar las rutinas que tenia planeadas. De nuevo pulso el botón de play y la música comenzó a sonar de nuevo. Michelle estiraba y flexionaba sus brazos para que estas tuvieran mas fuerza. Corrieron un par de vueltas al campo sin que la música dejara de sonar. Trataba de no escuchar lo que la canción decía, se negaba a recordarlo a él. Cuando se detuvieron hizo como se limpiaba el subir de la cara pero en realidad eran dos lagrimas escurridizas que pretendían resvalar sobre sus mejillas. –Muy bien chicas, creo que ya calentamos lo suficiente.-ahora es tiempo de ver como haremos la rutina que teníamos pensada, todas ya saben que debemos trabajar con fuego.-hizo una pausa esperando que las chicas asintieran. –Ahora todas saquen sus bastones.-camino a su bolsa y saco un bastón un poco más largo que los normales. –Todas ya saben que en la puntas de cada uno abra fuego, así que comiencen a trabajar con el, teniendo en cuenta que los extremos de este estarán en llamas, las chicas que son de la pirámide, comencemos a practicar mientras que las demás hacen lo suyo con el bastón.-tomo el bastón entre sus manos y hábilmente lo deslizaba entre sus dedos, solamente el centro era lo que sus dedos eran capaces de palpar. –Esta será una de las rutinas más elaboradas que jamás se han visto, así que todas a trabajar a menos que alguien tenga algo que decir. -siguió moviendo el bastón entre sus dedos un tanto pretenciosa, en espera de que alguien dijera algo.

Llegué casi corriendo hacia el sitio de las prácticas; *genial!! mi primer día en el equipo y ya llego tarde!!*maldigo por dentro mientras a lo lejos observo a cuatro chicas alejarse; sigo trotando mirándolas cada tanto y acercándome al resto del equipo.

Una vez frente a ellas, obviamente no pude evitar darme cuenta de que hay una especie de ambiente tenso, que quizás no es una de sus mejores días como grupo; y agradezco que la Coach no esté allí, pues por lo que había oído, no era una persona fácil de llevar, que aceptara por ejemplo, las llegadas tarde; aunque de todas formas, no volvería a ocurrir.

Cruzo los brazos como mecanismo de autodefensa ya que espero algún tipo de crítica de parte de las chicas, y comento segundos después de aclararme la garganta, fingiendo total naturalidad y con el bolso aún colgando de mi hombro: -hola, soy Crystal.... es mi primer día en el equipo...lamento llegar tarde, no volverá a ocurrir, se los aseguro...-

Aflojo los brazos, dejando caer el bolso al piso y aplaudiendo una sola vez, con una sonrisa totalmente entusiasta, agrego mirándolas todas: -corrí media escuela, así que no necesito precalentar.....ya estoy lista para lo que necesiten...aunque deberán indicarme un poco que hacer....al menos al principio aprendo rápido!!-.

Obviamente uno de mis objetivos secretos, era seguir siendo la misma persona de carácter fuerte a la cual respetaran, como en mi antigua escuela,para que nadie me molestara por ser nueva..sabía que no sería fácil, pero aún así no iba a rendirme; y un modo de lograrlo, era perteneciendo a las Cheerios y estar en la cima de la pirámide social,e iba a esforzarme al 100% para ello....
Además mi hermana mayor había sido una de las mejores porristas de su escuela cuando estaba en el secundario; y aparte de adorar ser animadora, debía satisfacer a mi familia en su pequeño capricho de ser tan buena como ella.